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¡Hola chicas! Hoy quiero adentrarme con vosotras en el mundo de la cirugía plástica y me llama mucho la atención la blefaroplastia. Así que me puse a investigar un poco y, a continuación, les cuento lo que tienen que saber si se atreven a darse un retoque de este tipo en el rostro.
Se trata de un procedimiento estético con el que se corrige el exceso de piel en los párpados. Su objetivo es erradicar las bolsas que se forman en la parte inferior de los ojos y corregir la caída natural de los tejidos que ocurre cuando avanzamos en años.
Los años y la gravedad dejan signos visibles en el rostro y, en el caso de las bolsas en los ojos, también puede obedecer a herencia genética. Con este tipo de cirugías se pueden corregir esos defectillos como por arte de magia para lograr una apariencia más joven y saludable.
Así se hace una blefaroplastia
Hay muchas mujeres que de solo pensar en una cirugía estética sienten temor y debo confesarles que a mí también me produce un poco de incomodidad pensar en el bisturí. Pero te agradará saber que el retoque en los párpados es un procedimiento no invasivo y en aproximadamente dos horas habrá culminado.
Se usa anestesia local para hacer incisiones en los pliegues de la piel que están alrededor del ojo, de esa manera es muy sencillo eliminar el exceso de tejido. Ya que el corte se hace en los pliegues naturales, no queda ningún tipo de cicatriz, lo que significa que nadie se dará cuenta que te hiciste un retoque.
A mí me parece genial porque ¿no es ese uno de los objetivos de la cirugía estética: verte bien de forma natural?
Si las bolsas en los ojos es lo que te molesta, se puede corregir el problema eliminando el exceso de grasa. Te agradará saber que para este procedimiento el cirujano no cortará la piel, porque la incisión se hace a través de la membrana conjuntiva y de allí, se retira la grasa que ocasionan las bolsas. Es decir, no quedará ningún tipo de cicatriz. Esto la convierte en una de las cirugías estéticas no invasivas más solicitadas.
¿Tardaré mucho en recuperarme?
Como cualquier otra cirugía plástica hay que darle tiempo a la piel para que se recupere, que baje la inflamación y los tejidos se amolden a su lugar. Al tratarse de un procedimiento tan sencillo, en dos días máximo podrás regresar a casa para, desde allí, continuar la recuperación.
Tras la operación el cirujano necesitará mantenerte en observación por unas 48 horas. Es normal que sientas un poco de dolor, pero nada que no pueda controlarse con analgésicos y antiinflamatorios. De acuerdo a tu historial clínico, el médico tratante definirá cuáles serán los indicados.
Cuatro días de mucho descanso, podrás retomar tus actividades cotidianas, pero deberás esperar por lo menos dos semanas para observar los resultados definitivos. Les cuento que tengo un par de amigas que ya se han hecho la blefaroplastia y, la verdad, sí creo que vale la pena intentarlo.
Además de vernos más guapas ¿Qué otros beneficios tiene?
Lucir más jóvenes con solo unas pequeñas incisiones y con el mínimo de molestias es una gran ventaja, pero esta cirugía estética ofrece más beneficios. Les cuento chicas:
- Devuelve la seguridad en sí mismas: La verdad es que las bolsas en los ojos son bastante molestas y a diferencia de otros defectos, son muy difíciles de ocultar. Estudios demuestran que, al eliminar este exceso de grasa el cambio en el rostro es tan positivo que ayuda a devolver la autoestima a los pacientes.
- Mejora la visión: Está comprobado que tras hacer este procedimiento las personas mejoran notablemente su campo de visión. La razón es que cuando hay flacidez en los párpados, la piel recubre parte del ojo haciendo que veamos con un poco de dificultad.
¿Hay algún tipo de riesgo?
Les mentiría si les digo que es un procedimiento estético 100% seguro. Todas las cirugías tienen riesgos, por eso es importantísimo chicas que se coloquen en manos de los mejores profesionales y sigan al pie de la letra sus instrucciones.
Si hacen exactamente lo que el cirujano les indica no tienen que sufrir efectos secundarios. De lo contrario podrían tener que lidiar con:
- Irritación en los ojos
- Infección o sangrado
- Dificultad para cerrar los ojos
- Cicatrices en la piel
- Visión borrosa
- Formación de coágulos sanguíneos
Cuando ocurren este tipo de inconvenientes hay que recurrir a más medicamentos y en algunos casos volver a realizar el procedimiento. Así que les repito: ¡Nada de desobedecer al cirujano!
¿Cómo me preparo para una blefaroplastia?
Aunque se trata de un procedimiento sencillo, necesitas prepararte. Así que el médico a cargo te solicitará tu historia clínica. Esto consiste en conocer sobre tus cirugías anteriores, enfermedades pasadas y actuales como alergias, diabetes, entre otras. También es importante que le comentes al médico si tomas algún tipo de tratamiento, incluso vitaminas.
Te cuento que la comunicación con tu doctor es un factor clave para la preparación de la cirugía. Así que háblale sobre tus expectativas, qué te motiva a hacerte una blefaroplastia, te aseguro que el cirujano te explicará todo en detalle y podrá resolver cualquier duda que tengas.
Durante la consulta el médico realizará una exploración física, es normal que sientas un poco de nervios, sin embargo forma parte del preoperatorio. Es muy posible que haga un análisis de la producción de lágrimas y mida el tamaño de los párpados. También te harán un examen para determinar si el exceso de grasa y los párpados caídos están comprometiendo tu visión. Para finalizar hará fotografías de tus ojos desde diferentes ángulos, luego del procedimiento podrás comparar el antes y el después. Si les digo un secretillo, pues esta es la parte que más me gusta.
Por último les cuento que los resultados de esta cirugía, con los cuidados adecuados, pueden durar para toda la vida. Aunque en algunos casos en los que los problemas son de genética, existe la posibilidad de que en algunos años los párpados vuelvan a caerse.
Ahora cuéntenme, ¿les gustaría quitarse unos años con la blefaroplastia?
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