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John Galliano es uno de los diseñadores más relevantes de los siglos XX y XXI, aunque su carrera se ha visto truncada por más de un escándalo. La polémica siempre le ha perseguido, pero los grandes resultados obtenidos gracias a sus creaciones siempre han sido superiores, llegando así a ganarse el prestigio que ha obtenido a lo largo de sus casi 40 años de carrera.
Biografía y primeros años de John Galliano
Juan Carlos Antonio Galliano-Guillén, nombre de nacimiento del diseñador, nació el 28 de noviembre de 1960, en Gibraltar. De madre andaluza y padre gibraltareño, cuando cumplió los seis años se mudaron a Londres, donde comenzó a empaparse de la exquisitez de la moda británica.
Tras involucrarse totalmente en sus estudios, en el año 1984, se graduó como diseñador de moda en la Saint Martin’s School of Art, presentando como trabajo de fin de curso una impresionante colección basada en la Revolución Francesa, que bautizó con el nombre de Les Incroyables. Esto fue tan solo el principio de su apoteósica carrera.
Cómo se convirtió en director creativo de algunas de las grandes casas de moda
Su colección Les Incroyables fue adquirida en su totalidad por la boutique Browns, lo que impulsó al diseñador a crear su propia firma y a conseguir patrocinadores.
Muy pronto se determinó su propio estilo, con creaciones dramáticas, complicadas y excéntricas.
Pero de nada sirvió su talento innato para la moda sin conocimientos comerciales, lo que le llevó a declararse en bancarrota en el año 1990.
En total decadencia, llevó a cabo trabajos puntuales hasta que conoció a dos grandes referentes de la revista Vogue en su edición estadounidense, la famosa Anna Wintour, editora jefe, y Andre Leon Talley, director creativo. Ambos le pusieron en contacto con São Schlumberger, coleccionista y mecenas de moda y arte, quien le cedió su casa para un desfile de moda.
Tal fue la calidad del trabajo, una vez más, de John Galliano, que tanto Schlumberger como otros inversores comenzaron a apoyar, de nuevo, al diseñador, lo que se tradujo en su nombramiento como director creativo de Givenchy en el año 1995.
Pero su etapa en la maison francesa duró poco, ya que tan solo dos años después, Galliano decidió tomar un cambio de rumbo, comenzando a trabajar como diseñador en Dior. Compaginando este trabajo con su propia firma.
El estilo de John se reflejó claramente en las nuevas propuestas de Dior durante los 15 años que el británico estuvo al frente de la casa. Sofisticación y extravagancia a partes iguales, reflejo expreso de su propia persona. Y es que él mismo era una persona pintoresca, tras los shows de Dior siempre terminaba apareciendo en la pasarela con looks de lo más llamativos, creando así su seña de identidad.
Pero, una vez más, el auge de su trabajo tuvo una nueva caída en picado. En el año 2011, a causa de sus adicciones, Galliano tuvo una pelea en un bar parisino, donde pronunció insultos con un claro desprecio hacia el colectivo judío.
Esto, como era de esperar, llevó a Dior a terminar su contrato con el diseñador.
Pero, cual ave fénix, John Galliano siempre renace de sus cenizas y tras años en la sombra y después de desintoxicarse y pedir perdón en varias ocasiones de manera pública, en el año 2014 Maison Margiela le ofreció una nueva oportunidad.
Desde entonces, el diseñador se encuentra al frente de la casa de lujo francesa, basando su trabajo en creaciones emocionales, tecnológicas y muy innovadoras.
Espero, como gran seguidora de su trabajo, que esta vez sea la definitiva y que podamos seguir disfrutando muchos más años de su arte y que no haya una nueva caída. Y es que sería una pena que alguien con la pasión y el talento de John Galliano desapareciese del mundo de la moda nuevamente.
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