¿Cómo elegir un protector solar para el rostro?.

A estas alturas a ninguna nos cabe dudas sobre la importancia del protector solar. Ya no sólo en verano, si no, durante todo el año. A pesar de su importancia en todo el cuerpo, en el rostro aún lo es más, ya que en la calle y en el exterior en general, la cara es una de las zonas más expuestas y de las más delicadas. Además de esto, a partir de cierta edad comienzan a aparecer ciertas manchitas en la piel del rostro que a muchas de nosotras suelen llevarnos de cabeza. Para evitarlas, ya nos lo dicen los dermatólogos: la solución es evitar el sol. Y para ello, la mejor forma de conseguirlo es protegiéndonos de él cuando vamos a la playa mediante sombreros y, por supuesto, del protector solar facial adecuado. Pero también cuando vamos por la calle.

Ahora que se aproxima el verano es el momento perfecto para hablar sobre ello. Muchas nos conformamos simplemente con un protector solar de factor elevado para nuestro rostro, sin prestar atención a otros aspectos como nuestro tipo de piel o el mero hecho de esta zona tiene unas necesidades más específicas que las del resto del cuerpo. Para solucionar todos estos problemas, he preparado este artículo en el que te ayudo a elegir un protector solar adecuado a tu rostro.

¡Toma nota!

Consejos para elegir un protector solar para el rostro

Muchos de los protectores solares suelen dejar una sensación untuosa en nuestra piel, además de la terrible capa blanca. Por esto es que, muchas mujeres odian el paso de aplicar protector solar al rostro, sobretodo cuando hablamos de pieles mixtas o grasas, a las que les cuesta encontrar el equilibrio entre la protección perfecta, la hidratación adecuada y el control de exceso de sebo. Para evitarlo, debes prestar atención a las siguientes indicaciones.

El primer fallo que suele cometerse es pensar que los protectores solares valen para todos los tipos de piel. Al igual que no existe dos tipos de piel iguales, no debes dar por hecho que cualquier protector solar servirá a todo el mundo. Esto me lleva a destacar la importancia de saber diferenciar cuándo necesitamos un simple fotoprotector y cuando será necesario aplicar un fotodérmico. Para las que aún no sepan cuál es la diferencia, los fotodérmicos son nuevas fórmulas que protegen del sol al mismo tiempo que corrigen y previenen los problemas generados por la exposición solar, mientras que los fotoprotectores solo protegen.

Debes tener en cuenta cuál es tu fototipo de piel, es decir, la capacidad que tiene tu piel para asimilar la radiación solar, la cual dependerá de la tonalidad. Existe 6 fototipos diferentes:

• Fototipo I: personas con pieles muy claras y con pecas. Aquellas que se queman con mucha facilidad y no suelen broncearse. En estos casos el factor de protección necesario será siempre de SPF 50.
• Fototipo II: personas con pieles claras, con propensión a quemarse y que tras varias exposiciones al sol suelen broncearse un poquito. Estas necesitan un factor de protección SPF 50.
• Fototipo III: personas con pieles claras durante el invierno, que se broncean con facilidad en verano, pudiendo llegar a quemarse en las primeras exposiciones. Lo ideal en estos casos es usar SPF 50 en el rostro y el cuerpo, en las primeras exposiciones, y SPF 30 una vez que ya se ha bronceado pero con precaución.
• Fototipo IV: son aquellas personas que tienen un tono de piel tostado, se brocean con facilidad y no suelen quemarse. Lo recomendable es usar SPF 50 en el rostro y SPF 30 en el resto del cuerpo.
• Fototipo V: personas con la piel morena o amarronada, que se broncean inmediatamente, llegando a quemarse únicamente tras una larga exposición al sol. Estas personas necesitan un factor de protección SPF 30.
• Fototipo VI: personas de raza negra, que mantienen durante todo el año el mismo tono de piel y raramente llegan a quemarse. Lo recomendable es un factor SPF 30.

Puedes encontrar todo tipo de protectores solares en cualquier farmacia, con alto factor de protección, que además combinan otras acciones como ácido hialurónico, con toque de color, especiales para pieles grasas, con antioxidantes que evitan la aparición de arrugar, con ingredientes nutritivos… Te aconsejo que visites Granafarma dónde acostumbran a ofrecer packs y descuentos interesantes en protectores solares.

Un consejo que dan los expertos en dermatología es elegir un protector solar con niacinamida, un ingrediente activo que, además de ser muy hidratante en todo tipo de pieles, tiene acción calmante y la capacidad de equilibrar otros principios activos, causantes de irritaciones o reacciones en pieles con acné o sensibles. Porque esto es otra, algunos protectores solares pueden llegar a causar granitos en algunas pieles, y si te ha pasado alguna vez sabrás de lo que te hablo…

Debes tener en cuenta que, antes de tu protector solar debes aplicar tu crema hidratante específica para tu tipo de piel, ya que ambos cumplen funciones distintas en tu rutina de belleza.

¿Qué cantidad de protector solar necesito aplicarme en el rostro?

La cantidad de producto que apliques en tu rostro variará según a quién le preguntes. Aunque la opinión más generalizada suele ser la longitud de uno y dos dedos de la mano.

Por suerte, a día de hoy tenemos mucha más información sobre los efectos negativos del sol en nuestra piel, y ahora gracias a estos consejos todavía más. Así que este verano te has quedado sin excusas para evitar protegerte adecuadamente del sol.