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Guardar cosméticos en la nevera, ¿error o acierto?
Los productos cosméticos, dada su formulación, requieren de un cuidado específico que se basa en guardarlos en un lugar adecuado, con el fin de que no se estropeen y sean eficaces.
Los fabricantes suelen aconsejar que este tipo de artículos se guarden en algún lugar fresco, seco y sin estar expuestos de manera directa al sol. A pesar de que muchos solemos guardarlos en el baño, ya que tiende a ser el lugar donde los utilizamos, realmente no es el más adecuado, ya que hay humedad y cambios notables de temperatura, lo que puede llevar a alterar las formulaciones.
Entonces, ¿Cuál es el lugar más adecuado para guardar nuestros cosméticos? ¿Es la nevera una buena idea?
¿Qué tipos de cosméticos se pueden guardar en la nevera y cuáles no?
Elegir la nevera para guardar estos productos es una buena opción en determinadas ocasiones, sí que es cierto que no suele ser necesario almacenarlos en un entorno tan frío, pero es un buen sitio dado que tanto la humedad como la temperatura se mantienen constantes. A pesar de esto, cabe destacar que solo algunos productos aceptan ser guardados en la nevera, otros, como es el caso del maquillaje, pueden alterarse.
- El contorno de ojos es uno de los artículos cosméticos que se aconseja guardar en la nevera. No tanto por su mantenimiento, sino porque al mantenerse frío ayuda a disminuir la hinchazón de esa zona del rostro y a minimizar la apariencia de las ojeras y las bolsas.
- Los tónicos y las brumas faciales tienen un efecto calmante y refrescante sobre la piel cuando se guardan en el frigorífico, aportando al rostro una sensación similar a la del agua fría por las mañanas.
- Las cremas del cuerpo, como el after sun, las cremas anticelulíticas o aquellas dirigidas a calmar la pesadez de las piernas, también ofrecen beneficios extra al estar almacenadas en la nevera.
- Aquellos productos que se han elaborado a base de ingredientes naturales o bien aquellos que se han creado a partir de una alta concentración de ingredientes activos como el retinol o la vitamina C también se pueden guardar en la nevera, sobre todo durante el verano, puesto que el calor y la acción directa del sol pueden hacer que se descompongan más rápidamente.
- Las mascarillas faciales aumentan sus beneficios si se guardan en el frigorífico.
- En cuanto a los bálsamos labiales, se aconseja que sean guardados en la nevera durante el verano, ya que debido a su composición, pueden llegar a derretirse si se exponen a altas temperaturas.
- También los esmaltes de uñas se pueden guardar en frío, para evitar que a causa del sol y del calor se descompongan.
- Algunos accesorios de belleza como las esponjas utilizadas para aplicar el maquillaje facilitan su uso al ser guardadas en frío.
- Por último, si guardamos un perfume en la nevera, el aroma del mismo se intensificará.
Pero hay algo muy importante a tener en cuenta si se decide guardar estos productos cosméticos en la nevera y es que, como ya he comentado anteriormente, el mayor problema al que se pueden enfrentar es a los cambios bruscos de temperatura, por lo que una vez utilizados, debemos volver a guardarlos en frío para evitar que se estropeen.
Además, en la actualidad, muchas marcas cosméticas han lanzado neveras minis destinadas a guardar estos productos, ¿lo sabías?
Beneficios del frío sobre la piel
¿Sabéis por qué digo que algunos de los productos que se pueden guardar en la nevera aumentan sus beneficios de este modo? Porque realmente el frío ofrece algunos efectos positivos para nuestra piel.
En primer lugar, las bajas temperaturas son capaces de estimular la circulación sanguínea, con todo lo que ello implica, llegando incluso a, con un uso continuado, ayudar a rejuvenecer la piel.
Otro gran beneficio, sobre todo en la zona de las ojeras y las bolsas, es que el frío ayuda a descongestionar y desinflamar aquellos puntos del rostro que acumulan más líquido.
También es capaz de ayudar en el proceso de regeneración celular.
Por último, debido al cambio de temperatura que supone la aplicación de frío sobre el rostro, los poros dilatados se cierran, haciendo que la piel luzca más tersa. De este modo, podemos evitar la aparición de nuevas arrugas, así como incrementar la hidratación de la piel.
¿Sabías que los cosméticos caducan?
Así es, los productos cosméticos tienen una vida útil limitada dada su composición. Esta varía en función del artículo concreto y de los ingredientes utilizados para su elaboración. Las cremas, por lo general, una vez se han abierto tienden a durar entre seis y doce meses.
Pero saber el tiempo que dura en perfecto estado cada producto es más sencillo de conocer, basta con fijarte en el bote donde aparece siempre un número y la letra M. Esto indica el número de meses que se puede utilizar dicho cosmético una vez se ha abierto.
Hay que tener cuidado con la caducidad de este tipo de productos ya que no solo pierden su eficacia, sino que pueden llegar a causar alergias e irritaciones en la piel.
Entonces, puede llegar a ser un acierto guardar nuestros productos cosméticos en la nevera, siempre que se mantengan de manera constante en este lugar para evitar variaciones bruscas de temperatura. De todos modos, en España no es totalmente necesario, ya que no suele hacer tanto calor y los cosméticos pueden mantenerse correctamente en una temperatura media entre 18 y 25ºC. Lo que sí que es cierto es que hay que procurar evitar el contacto directo con el sol y la humedad, así como los cambios bruscos de temperatura. Y seguir siempre las recomendaciones dictadas por el fabricante.
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