¿Los gigantes de la moda son “buenos alumnos” del respeto al medio ambiente?

Ahora más que nunca es sumamente importante ir en busca de una sociedad sostenible, cuidadosa con el medio ambiente y que sea capaz de controlar la producción excesiva que llevamos años viviendo. Es importante a nivel global, en todo tipo de industrias, pero hoy quiero hacer especial hincapié en el sector de la moda que, aunque muchos no se lo puedan creer, ha llegado a convertirse en la segunda industria más contaminante del mundo.

Los distintos agentes pertenecientes a este gran sector llevan años dándose cuenta de esta problemática y animando a las distintas marcas a poner su granito de arena en la búsqueda de un sector más sostenible. Pero hemos llegado a la situación que llevamos años temiendo, al punto de no retorno, al momento de implantar sí o sí el cambio si queremos que las consecuencias no sean irreversibles. Y es una labor de todos, no solo de los fabricantes, sino también de los consumidores, apoyo básico para que siga en marcha la fast fashion.

Hace unos años, 32 marcas internacional firmaron el Pacto de la Moda del G7, entre las que podemos encontrar grandes firmas como Chanel, Burberry, Adidas, Nike, Inditex, Prada, Stella McCartney o los grupos Kering y PVH. Todos ellos llegaron a un acuerdo basado en tres pautas principales:

• Eliminar las emisiones de gases de efecto invernadero para el año 2050.
• Disminuir la utilización de plásticos de un solo uso para 2030.
• Apoyar la innovación para acabar con la contaminación derivada del uso de microfibras.

Ha pasado el tiempo y han sido múltiples las acciones en torno al cuidado del medio ambiente que han llevado a cabo las grandes marcas a nivel mundial, pero

¿ha sido suficiente?

¿En qué se basan los proyectos de sostenibilidad de las grandes marcas?

Algunas de las principales acciones en torno a la sostenibilidad y al cuidado del medio ambiente podemos encontrarlas en el siguiente listado:

• Prada, una de las firmas más comprometidas con la sostenibilidad, ha lanzado su gama Re-Nylon.
• Ralph Lauren ha incluido un nuevo servicio a su firma, The Lauren Look, sistema dirigido a alquilar ropa de forma mensual, para reducir el impacto en la producción de sus piezas.
• Mango ha incluido en su catálogo su gama de productos para el hogar, con un compromiso de sostenibilidad basado en el uso de textiles ecológicos y en un alto porcentaje de su producción elaborado en la proximidad.
• Stella McCartey ha sido la primera de las grandes firmas de moda en subir una línea de moda sostenible a las pasarelas más famosas del mundo.

Estas son solo algunas de las acciones llevadas a cabo por los gigantes de la moda, pero como veis, se trata de actividades y proyectos aislados, no ha existido ningún cambio radical y es lo que necesita el planeta ahora mismo: un lavado de cara total del sector, un cambio de 180º que convierta los procesos y forma de consumo actual en un nuevo paradigma basado en el slow fashion, y todos debemos formar parte del cambio.

El informe elaborado por McKinsey & Company’s bajo el nombre “El estado de la moda 2021” y publicado por el medio Business of Fashion ha decretado que las grandes marcas están teniendo ciertos problemas a la hora de cumplir los compromisos firmados en el pacto previamente mencionado.

Un total de 15 firmas y grupos de marcas han sido analizados en base a seis aspectos principales: sus emisiones CO2, la transparencia de sus acciones, el uso de agua y productos químicos, el tratamiento de desechos, los materiales utilizados y los derechos de los trabajadores. Después del estudio, la consultora ha decretado que ninguna de las empresas alcanza un 50% de acciones sostenibles necesarias para el cambio.

Entonces la respuesta es clave: los gigantes de la moda puede que sean buenos alumnos, pero les falta mucho todavía para aprobar y carecen de tiempo. Y es que hemos llegado a un momento en el que mostrar intenciones de llevar a cabo un cambio ya no basta, es momento de poner toda la carne en el asador y cambiar de una vez por todas, por el bien del sector, de las personas implicadas, de la sociedad en general y, sobre todo, de nuestro planeta.

Apuesta por aquellas marcas cien por cien sostenibles (medio ambiente)

No podemos negar que muchas firmas ya consolidadas están intentando, poco a poco, conseguir los planes de sostenibilidad y medio ambiente internacionales. Hasta que lo consigan, podemos optar por ciertas marcas que nacieron sobre un nicho de sostenibilidad, no solo enfocadas al cuidado del medio ambiente, sino teniendo en cuenta el respeto al trabajador.

A pesar de lo que antes se solía pensar, la sostenibilidad y la ecología no están reñidas con el estilo y el buen gusto, y prueba de ello son las siguientes marcas:

• Ecoalf: esta marca española utiliza, en la elaboración de todos sus productos, distintos tipos de materiales reciclados, incluidos aquellos plásticos extraídos del mar. Su compromiso con el medio ambiente se basa en la reducción de emisiones de CO2, en el diseño circular y en el mantenimiento de una cadena de suministro totalmente eficiente. Además, en sus procesos de confección utilizan aquellos materiales y fibras que dejen la huella hídrica más pequeña, técnicas de teñido más eficientes y que consuman la menor cantidad posible de agua y restricciones de uso de aquellas sustancias dañinas.
• EcoPwani Menorca: otra gran marca española orientada a la sostenibilidad y cuidado del medio ambiente. Para ello, diseñan y fabrican calzado innovador a partir de los mismos principios ecológicos que las alpargatas de neumático reciclado, pero en este caso, los principales materiales que utilizan son los residuos marinos, focalizándose en la problemática con los plásticos.
• Hupit: una marca más basada en nuestro país, más concretamente en Valencia, la cual cuenta con un modelo de fabricación sostenible, ecológico y libre de sufrimiento animal. Además, utiliza en todos sus productos tintes naturales, para disminuir los químicos en el proceso de fabricación.
• Wildlife Company: utiliza tejidos de producción ecológica, además utiliza sustancias libres de químicos y sin metales pesados. Pero su conciencia ética va más allá y es que favorece el empleo y el desarrollo de aquellos grupos de personas considerados en riesgo de exclusión social.
• Xiro Atlantic Denim: otra marca española más, con todos sus productos elaborados en Galicia. Pero no solo basta con la fabricación social, sino que además utiliza tejidos sostenibles, como el algodón orgánico, el cual cuenta con certificado GOTS que asegura la condición orgánica del mismo. Además, también lucha por conseguir unas condiciones laborables totalmente justas para todos sus trabajadores.

Otras grandes marcas en las que te debes fijar son BIOBUU, Bolsalea, Deriva Sailmakers, IAIOS, Just the Sea o Velvet BCN, entre muchas otras que se están uniendo a la revolución. No les pierdas la pista, prometen mucho.

Es importante consumir de forma coherente, pensando en el medio ambiente y en todo lo que hay detrás del diseño y elaboración de prendas y complementos, incluyendo el grupo humano que se encarga del trabajo manual.

Y es que como llevan gritando a los cuatro vientos los seguidores del slow fashion durante años, There is no planet B!, así que debemos cuidar el nuestro.