Dieta para combatir el acné

Siempre ha sido muy normal la existencia de pieles con tendencias al acné, pero en los últimos meses, a causa del uso de la mascarilla de forma obligatoria, a causa de la pandemia por coronavirus, se han incrementado los casos de afecciones cutáneas con este tipo de síntomas, conocido en la actualidad como maskacné.

Existen numerosos tratamientos capaces de disminuir los signos asociados al acné, llegando incluso a eliminarlos por completo, pero es muy recomendable complementar aquellos procedimientos médicos con una alimentación equilibrada, que consiga, desde el interior del organismo, reducir la creación de sebo y evitar la inflamación de la piel, regulando, además, la cantidad de azúcar en sangre.

De este modo, se podrá controlar la aparición de espinillas y puntos negros y controlar la cantidad de grasa del rostro, la cual tiene a taponar los poros, evitando que traspiren de forma correcta y haciendo que se acumule suciedad en los mismos.

Para conseguir una piel cuidada, limpia y luminosa, sin brillos ni grasa en exceso, debemos llevar a cabo una dieta completa, equilibrada y bien cuidada, incluyendo los ingredientes que veremos a continuación.

¿Qué ingredientes son necesarios en una dieta equilibrada para acabar con el acné?

Es sumamente importante incluir en nuestra dieta distintos tipos de alimentos ricos en fibra, omega 3 y zinc, el cual ayuda a disminuir la cantidad de grasa generada, del mismo modo que ayuda a favorecer la cicatrización de la piel, evitando que una vez desaparezcan los signos principales del acné, queden marcas, cicatrices o, incluso, manchas.

Para conseguir unos resultados beneficiosos y una piel cuidada y sin rastros de acné, es importante incluir en la dieta diaria los siguientes tipos de alimentos:

• Algunos tipos de carbohidratos saludables, tales como el arroz integral, la avena, la harina integral, la pasta también integral y la quinoa.
• Es importante, tal como os adelantaba, contar con alimentos ricos en omega 3 gracias a su capacidad antiinflamatoria, capaz de aliviar ciertos síntomas asociados al acné. Para ello, se aconseja incluir en la dieta distintos alimentos ricos en este tipo de ácido graso, tales como el atún, las sardinas, el salmón, la linaza, la chía o las nueces, que además ayudan a mejorar la digestión y la absorción de nutrientes.
• Además de la chía y la linaza, otras semillas también pueden incluirse en la dieta diaria, ya sea en ensaladas, como acompañantes de yogures naturales o en batidos y smoothies. Dos de las más utilizadas son las semillas de calabaza y las de girasol.
• Además, no podemos olvidarnos de incluir frutos secos, como avellanas, almendras, cacahuetes, pistachos o castañas de Brasil, entre otros.
• Es importante contar con alimentos con distintos tipos de vitaminadas, desde la vitamina A con ingredientes como el mango, la papaya, la espinaca, la zanahoria o la yema de huevo; y alimentos con vitaminas C y E, como la naranja, el limón, el aguacate o el brócoli. La vitamina E es un gran antioxidante, por lo que es importante contar con este tipo de alimentos, como las aceitunas negras, fuente también de grasas saludables.
• Tampoco pueden faltar las alcachofas, las cuales gracias a su contenido en fibra son capaces de ayudar a cuidar el tránsito intestinal y la flora, además cuentan con sustancias beneficiosas para la función hepática que ayuda a desintoxicar el organismo.

Otros compuestos importantes a incluir en la dieta diaria para combatir el acné son:

• Dieta rica en fitoestrógenos: alimentos tales como las alubias, las lentejas o la soja, ayudan a mantener el equilibrio hormonal, ya que en ocasiones un perturbación de las hormonas es la causante de algunos tipos de acné.
• Antioxidantes: eficaces para calmar ciertos tipos de afecciones inflamatorias de la piel, como es el caso de las uvas negras.
• Alimentos antibióticos y antiinflamatorios: como el ajo negro.
• Inmunoestimulantes: como los champiñones, capaces de ayudar a regular el azúcar en sangre gracias a su alto contenido en zinc y de tonificar el sistema inmunitario.
• Alto contenido en fibra: este tipo de alimentos son capaces de regular la insulina, la cual estimula ciertas hormonas masculinas causantes, en ocasiones, de ciertos tipos de acné.

Además, es importante disminuir el índice glucémico de la dieta a consumir, cambiando ciertos alimentos como azúcar refinado, arroz blanco, patatas o pan blanco, por otros ingredientes con el índice glucémico más bajo, que sean capaces de liberar el azúcar más lentamente, como es el caso de las alubias, las lentejas y determinadas frutas y verduras.

¿Cuáles son los alimentos que debemos evitar?

Con el fin de evitar la aparición del acné, así como su proliferación una vez suframos esta afección cutánea, se debe intentar consumir lo menos posible aquellos alimentos con alta cantidad de azúcar y grasas, como son el chocolate, las frituras, las carnes grasas y determinados tipos de comida, como la precocinada y congelada o las comidas rápidas. Tampoco son aconsejables el pan, la bollería industrial, la harina, los lácteos y los quesos amarillos, entre otros.

La razón principal de esta limitación es que aquellos alimentos con un alto contenido en grasa y carbohidratos simples son capaces de incrementar la producción de sebo por parte de las glándulas sebáceas, haciendo que los poros se obstruyan más fácilmente.

Por otro lado, los lácteos también estimulan la síntesis de sebo, incrementando el taponamiento de los poros y la generación de granitos e impurezas.

Si sufres de acné, no debes preocuparte, es una afección cutánea muy común en la actualidad, además tiene solución, no siempre es sencilla, pero con una buena rutina de limpieza diaria, tratamientos específicos y una buena dieta equilibrada, lograrás acabar con sus síntomas principales y evitarás que queden cualquier tipo de marcas en tu rostro.